Residence Incubator Lab

     Positiva, curiosa y de mentalidad abierta, estoy siempre buscando nuevos desafíos para ampliar mis conocimientos y mis competencias.

 

Lo bueno del RIL es específicamente los intercambios de ideas y de culturas. Además, el ambiente convivial nos permite compartir nuestras diversas experiencias de vida, incluyendo nuestras experiencias laborales.

Es como si se hubiera implementado naturalmente un entorno relajado propicio al trabajo. Aquí, dependemos uno en el otro, así que en el RIL no tengo colegas sino que tengo amigos. 
 

El hecho de trabajar con empresarios y profesionales de experiencia me ayudó a desarrollar competencias importantes para mi futura carrera profesional. Por consiguiente, desde que estoy aquí, mejoré mis capacidades en términos de comunicación, de gestión de proyectos, de trabajo en equipo y mis competencias organizacionales.

 

El RIL ya me aprendió mucho y estoy segura de que mi experiencia aquí será de gran utilidad para mi futuro.